Retórica gestual pulverizada. Jon Mikel Euba

Jon Mikel Euba, Some Things Are Moving, Galería Soledad Lorenzo, Madrid
Publicado en Cultura/s, 19 de enero de 2005

Cuando una obra es tildada de política en una época en que se lleva cierto arte “social”, es probable que al autor se le invite a una Bienal Internacional como artista vasco, junto a otros de zonas calificadas de periféricas o conflictivas, para dar una respuesta rápida (y exótica) sobre los bordes del tejido urbano. Con seguridad, y en pos del mensaje, la retórica crítica terminará por banalizar los elementos constructivos de su trabajo.
Conocido ya internacionalmente por la subversión latente –en razón de la ambigüedad- de sus vídeos y fotografías, en donde se acoplaban bien los encapuchados (supuestamente de la kale borroka) en una recreación paródica de la ficción narrativa acorde a la producción de imágenes del Sistema (estadounidense), el itinerario vital de Euba, que en los últimos tiempos ha residido en Berlín, con proyectos en Busan (Corea), Bucarest o Estambul, le ha conducido a una superación del drama local, quizá sobre todo de su utilización en la agenda de los comisarios de turno, para roer el hueso de sus obsesiones visuales. Como resultado, la obra producida en los dos últimos años, se ha descarnado: la mise en scène ha desaparecido, tanto en la dimensión escenográfica, como en la signature autoral. Lo que queda es su fuerte impacto visual, el suspense y la importancia de su aportación al campo emocional ligado a la violencia, así como la de su sospecha ante la representación de comportamientos normativizados.
A partir de treinta serigrafías en blanco y negro, cuya dura factura las asemeja a xilografías, tomadas de la prensa y retocadas, Euba deconstruye la iconografía de las actitudes de los héroes de la música rock. A modo de partitura, son trasladadas a vídeos -grabados en Murcia, Bilbao y Busan-, con la asistencia de jóvenes que, improvisadamente, cámara en mano, intentan reproducir la sintaxis, sin advertir su pertenencia geocultural. A la sazón, con el desplazamiento a descampados urbanos y nocturnos, y su traslado a la distinta apropiación espacial desde la marca de género (femenina), se produce el acontecimiento imprevisto: la iconografía del éxito puede tornarse en representación del fracaso y la celebrity, en sumisión. Una obra colaborativa que pulveriza la retórica gestual occidental impuesta en la cultura juvenil globalizada.